La demanda en el mercado inmobiliario español no deja de crecer. El 2019 será un año clave para el sector, el cual prevé alcanzar la estabilidad en el presente año con crecimientos más moderados.
El sector de la vivienda en España, el cual ya encaminaba un transcurso de meses recuperándose, alcanzará la madurez en 2019, según los analistas. Hemos visto un fuerte crecimiento del sector inmobiliario en los últimos años, no obstante, se espera que durante este año, el sector modere sus crecimientos y consolide la recuperación del mismo.
Son muchas las personas que se asustan cuando oyen indicios de recuperación en el sector inmobiliario. El boom que vivió el planeta con el sector, así como la posterior crisis que éste provocó, aún genera el pánico en muchos ciudadanos, que miran con miedo una recuperación del sector. No obstante, el incremento de los precios y la recuperación que ha vivido el sector en estos últimos años no es, para nada, similar al que se dio durante el boom inmobiliario.
Ya en temas como los visados de obra nueva permitidos en el 2006, éstas, hoy en día, no llegan al 13% de los emitidos en 2006. Según indican los datos, las permitidas en el 2018 rondan las 100.000 licencias, mientras que, según hemos calculado, en 2006 estaban en torno a las 720.000 licencias. Esto muestra como todavía hay margen de crecimiento en el sector, sin alcanzar los máximos del ciclo de crecimiento anterior.
En temas como los precios de las viviendas, este ha sido el mejor año desde la crisis. Las subidas han rondado entre el 7% y el 8% -en 2006, el incremento de los precios se registró en el 7,7%-, variando en función de las comunidades autónomas. Para el nuevo año, estos incrementos se esperan mucho más moderados, a consecuencia de una estabilización del sector, por lo que estas se estiman entre el 4% y el 6%. Un crecimiento impulsado por el auge de la demanda en el sector, la cual se estima en un incremento del 10%.
Los precios son uno de los mejores indicadores para medir la salud del sector inmobiliario. Para el próximo año se espera que los precios continúen su crecimiento, no obstante, este se dará de una forma más moderada y controlada, como consecuencia de esta madurez y consolidación del sector de la que hablamos. Esto muestra un crecimiento de los precios mucho más controlado que durante los años del boom, donde los precios se disparaban injustificadamente, mientras que durante este ciclo, se incrementan con motivo del incremento de la demanda.
El incremento que está viviendo la demanda en el sector inmobiliario es bastante favorable. Las transacciones que se han realizado durante el 2018 alcanzan las 508.000 operaciones, de las que, aproximadamente, 420.000 fueron sobre casas de segunda mano. Para el nuevo año, se espera que el número de operaciones alcance las 625.000 operaciones, consolidando así su enorme crecimiento.
Según el consenso de mercado realizado, España necesita al año entre 120.000 y 140.000 viviendas nuevas. Si a esto le añadimos lo comentado anteriormente, donde veíamos que los visados de obra nueva estaban en los 100.000 y que las viviendas construidas al año en España rozan las 50.000; estamos ante una situación donde la demanda supera la oferta, por lo que el incremento de los precios se da de forma natural y no está estimulado por interesados, como ocurría en 2006.
Por otro lado, no debemos olvidarnos de la regulación que ha vivido el sector financiero en los últimos años. La aplicación de MiFiD II, así como muchas regulaciones aplicadas en ámbitos como la financiación hipotecaria, han provocado un mayor saneamiento en los créditos hipotecarios y el riesgo que suponen. El activo hipotecario que se posee en estos años posee una mayor calidad crediticia que la poseída en los años previos a la crisis.
Como podemos observar, este ha sido el mejor año para el sector de la vivienda. Los precios, la demanda, la construcción de obra nueva, todo crece. Además, este crecimiento, como hemos visto, se está dando de una forma sana y estable, pues como podemos observar, el crecimiento del sector, a diferencia de en 2006, se está apoyando en el crecimiento de la economía, y no, a la inversa, como ocurría en 2006, donde el crecimiento de la economía era la consecuencia de los crecimientos en el sector.
Sin lugar a dudas, estamos ante una clara recuperación de un sector que vuelve a introducirse de lleno en la economía española. La vivienda toma fuerza y el sector se recupera con el paso de los meses. Como hemos dicho, y por concluir trasmitiendo tranquilidad, estamos ante un sector que crece, esta vez, de una forma sana y controlada, impulsado, como hemos dicho, por el buen momento que atraviesa la economía y el incremento de la demanda de vivienda; el cual no deja de crecer.
Este año, 2019, será un año prometedor para el sector. Éste alcanzará su mayor grado de madurez durante el presente año y se espera que, con ese alcance de la madurez, continúe con un crecimiento sostenible en el largo plazo. Esto representa una gran noticia para el empleo español, que de contar con un sector de la construcción maduro y renovado, estaremos ante un nuevo generador de empleo para los ciudadanos del país y, por consecuente, una mejora de la economía.